
El Celta ha fijado de forma definitiva su posición y a día de hoy ya sólo contempla tres posibilidades para construir su ciudad deportiva: el monte de utilidad pública de Bembrive o sus aledaños, los terrenos de Valladares reservados para la frustrada Universiada 2013 y la zona de Liñeiriños, en Puxeiros.
Esta última posibilidad sería ahora mismo la favorita por los problemas de Bembrive y la complejidad de Valladares. Además tiene a favor su ubicación próxima al nudo de intersección de la autovía y la autopista. Desde el punto de vista urbanístico, en el Plan General (PGOM) en vigor aparece como un polígono residencial, empresarial, comercial y residencial, lo que -en teoría- permitiría casi cualquier tipo de desarrollo. En contra, la compleja orografía y sobre todo que se trata de un ámbito de cerca de un millón de metros cuadrados, de los que 300.000 serían comerciales y 150.000 tecnológicos, de los que el Celta necesitaría menos de una quinta parte.
Fuentes próximas al club vigués señalaron que tras una visita al entorno para conocer sobre el terreno sus posibilidades se están valorando pros y contras pero que la opción Liñeiriños tiene ahora mismo mucho a favor. No obstante, la decisión está lejos de ser firme: había acuerdo con la Entidad Menor de Bembrive y el alcalde lo frustró a última hora, para sorpresa general. En Valladares el terreno es particular y comunal, como en Liñeiriños, lo que exigiría una negociación intensa e impulso municipal claro.
LA ENTIDAD MENOR RECHAZA UN CENTRO COMERCIAL
El pedáneo de Bembrive, Roberto Ballesteros, aseguró ayer, a través de una nota de la Entidad Local Menor, que descarta la inversión que maneja la promotora británica British Land, que contactó con la anterior directiva parroquial de cara a explorar la posibilidad de instalar un centro comercial en la zona con una inversión de 350 millones, creando unos 1.500 puestos de trabajo. Según Ballesteros, el monte en cuestión, de utilidad pública, sólo se utilizará con proyectos ambientales 'como la ciudad deportiva del Celta' y rechazó 'pelotazos urbanísticos'. El alcalde pedáneo mantiene que el monte de Bembrive 'no es un lugar idóneo para un gran centro comercial debido a su impacto' pero también rechaza la actual calificación, reservada para una planta de reciclaje. 'Son ambas perjudiciales', sentencia.